El Sábado, con Yolanda nos acercamos a Masella para hacer la Tossa con sus algo mas de 900 metros de desnivel esquiable. Salimos del Plá de Masella a las 10 de la mañana con una temperatura bastante agradable y empezamos el ascenso por la derecha de las pistas sobre una nieve bastante esquiable. En poco tiempo alcanzamos un grupo de tres que habían salido unos minutos delante nuestro y nos pusimos unos metros por detrás de ellos. Entonces abandonamos la nieve pisada y seguimos por unas pistas cerradas donde mas que nieve había hielo y si a esto sumamos la inclinación y la poca experiencia del grupo de delante, dos de ellos cayeron y uno bajo unos 50 metros a gran velocidad, lo que hizo que Yolanda se sintiese insegura y no tardó ni un giro en caerse y golpearse la rodilla, yo bajé y le saqué los esquís, me los metí en la mochila y le dije que subiese por el bosque (no había nieve), al acabar aquella pala de hielo tan inclinada, el grupo de delante me hizo varias preguntas de como superar aquel hielo sin cuchillas, y Yolanda dijo que ella bajaba.
Ella bajó, y yo comencé a subir a un ritmo bastante alto y pasando a bastantes grupos que subían hasta la cima de la Tossa, donde llegué realmente empapado en sudor, quité las pieles y sin parar bajé los 900 metros que había subido.
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