Debían ser las 10h cuando dejamos el coche a las afueras de Vallfogona del Ripollés y comenzamos a subir por la pista que en algunos tramos estaba bastante helada, en una pronunciada curva abandonamos la pista principal para subir por un bonito camino que subía al lado del Rec del Tornai, donde los saltos de agua se combinaban con el color del bosque nevado y nos dejaron imágenes de gran belleza, tras una larga subida llegamos a una pista que nos llevo hasta la Barraca y de aquí con bastante nieve seguimos las marcas del Gr-3 hasta casi el mismo Castell de Milany (1533m).
Dicho castillo o lo que queda de él, son las ruinas de una fortaleza militar del siglo IX que vigilaba los términos d
e Vallfogona y Vilada, y que esta situado en un enclave privilegiado desde el que visualmente se domina gran parte de Cataluña y al que realmente merece la pena subir alguna vez.
Tras comernos unos pequeños bocadillos, comenzamos el largo descenso, esta vez por una inacabable pista a tramos de llena de nieve y a tramos llena de hielo que nos hizo alargar la excursión hasta algo mas de cuatro horas.
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