El pasado sábado, pude disfrutar o incluso sufrir un ultra trail que las altas temperaturas contribuyeron a endurecer, el ya por sí duro recorrido por tierras Pallaresas.
A las 5:30h de la mañana del Sábado y con bastante puntualidad se dio la salida, yo aún charlaba con algún compañero cuando nos dimos cuenta que esto ya había comenzado, salimos de la localidad de Rialp en pleno pirineo de Lleida y con 82 Km por delante, yo lo tenía claro mi único objetivo era acabar y mi ritmo tenía que ser mas bajo que en otras ocasiones sino lo podría pagar.
Puestos ya en carrera nada mas salir teníamos por delante unos 16 km en los que ascendíamos unos 2200 metros de desnivel hasta la cima del Montsent de Pallars, que coroné en el tiempo que me había propuesto antes de salir, la cima es guapísima y las vistas sobre la Vall Fosca y Aigüestortes impresionantes... No tengo problema en pararme a hacer una foto ya que he venido a disfrutar. El siguiente tramo es de alta montaña hasta coronar el Montorroio y encarar una larga bajada hasta Mainera, donde nos espera un gran avituallamiento para ascender por una larga pista a la Portella ya en el Kilómetro 22. Una vez aquí un inacabable descenso de 1200 metros de desnivel hasta el pueblo de Caregue en el km 30, que realizo con la compañía de Montse y Joan dos corredores de Olot con los que además de todo el descenso comparto todo el tramo de la Serra de Posa hasta el avituallamiento de Castell de Rialp en el Km 40 donde el calor a hecho estragos y muchos participantes deciden acabar aquí su carrera.
Montse y Joan deciden salir rápido y yo prefiero hacer una parada técnica a comer un poco y cambiarme los calcetines y salgo unos 15 minutos después que ellos, tras salir el calor es insoportable y comienza a destrozarme por dentro y lo peor es que lo estoy notando y no puedo hacer nada, al llegar a Rodés tras ascender unos 400 metros en unos infernales 3 Km me remojo en la fuente del pueblo junto a algunos corredores mas, pero hemos de seguir y el tramo hasta el pueblo abandonado de Sant Romà se me hace como estar dentro de un horno, es el peor sitio de la carrera para estar a las 15h, pero allí estoy soñando con cervezas frías y eso que a mí no me gusta la cerveza... Por fin llego al puente de Gulleri sobre el Noguera Pallaressa en el Km 50, y tras refrescarme un poco comienzo a ascender hacía los 2500 metros del Pic de l'Orri algo muy lejos dado mi estado causado por el fuerte calor, comienzo a ascender junto a un chico de Villarobledos (Albacete), que tras un par de Kilómetros decide retroceder y abandonar, yo sigo y en el pequeño pueblo de Roní recibo un avituallamiento espectacular con refrescos congelados y una manguera para refrescarme en la sombra, sencillamente no se puede pedir mas... Con que poco me conformo a estas alturas de carrera pero es así.
Continuó el ascenso ahora por la sombra de un bonito bosque, hacia una zona de búnquers de la guerra civil y antes de llegar allí comienzo a tener rampas en las piernas debido a la deshidratación sufrida en las horas previas, al llegar a los búnquers pido ayuda a unos bomberos para que me estiren las piernas y tras mas de media hora y conseguir comer y beber algo, continuo ascendiendo hasta el hotel Port-Ainé en las pistas de esquí del mismo nombre, y un poco antes de llegar he de encender el frontal, ahora ya es de noche.
Me lo tomo con calma, y estoy otra media hora, bebo un par de vasos de caldo, como un poco de pan y salgo hacia el Pic de l'Orrí, ahora es noche cerrada y las temperaturas han bajado tanto que he de abrigarme, pero parece que mi musculatura esta mejor, el cielo esta estrellado y llegando a la cima con el aire en la cara y viendo las estrellas... Vuelvo a saber que hago aquí: Disfrutar y sufrir a la vez, es como esas mezclas culinarias de dulce y salado que tanto disfruta nuestro paladar... Esto es estar vivo!!!!
Llego a la cima y comienzo los últimos 18 Km en descenso hasta la línea de meta, no puedo correr, pero ahora ya estoy contento, se que acabaré y aunque mi tiempo será muy malo habré cumplido mi objetivo, la bajada se hace muy, pero muy larga, pero al final cerca de las 2 de la madrugada y con un tiempo de 20:42h consigo atravesar la línea de llegada, donde me espera Yolanda con expresión de cansancio y sueño... Claro son las 2 de la mañana.
SubirMontañas
lunes, 17 de septiembre de 2012
jueves, 13 de septiembre de 2012
A punto para el Sábado
Parece mentira que esto me este pasando... A mí que estoy curtido en mil batallas, o mejor dicho en mil carreras, pero la verdad es que con lo poco que he competido esta temporada hoy a falta de pocas horas para que el sábado me enfrente a los 82Km del Ultra trail de Rialp Matxicons, empiezo a tener mariposas en la barriga.
Ya están aquí los nervios de prepararme para la "batalla", lo de siempre... Coger la lista de material obligatorio, llenar la mochila, buscar la ropa adecuada para lo que pueda encontrarme... Etc. Esto siempre se convierte en una ceremonia que se repite carrera tras carrera.
Después comienzan los momentos filosóficos en los que la cabeza empieza a hacer sus cálculos y preguntas, intentando imaginarme la carrera y como la he de plantear, si seré capaz de aguantar tantos kilómetros sin apenas haber corrido este año, pero la verdad es que esta vez todos mis pensamientos son positivos y creo que el ritmo de ultra trail es muy adecuado a mi entreno sobre dos ruedas, y que no tendré muchos problemas en realizar una buena carrera... En la que mi único objetivo es acabar y disfrutar de los muchos momentos buenos que te deja una prueba de esta características.
Nos vemos en Rialp.
Ya están aquí los nervios de prepararme para la "batalla", lo de siempre... Coger la lista de material obligatorio, llenar la mochila, buscar la ropa adecuada para lo que pueda encontrarme... Etc. Esto siempre se convierte en una ceremonia que se repite carrera tras carrera.
Después comienzan los momentos filosóficos en los que la cabeza empieza a hacer sus cálculos y preguntas, intentando imaginarme la carrera y como la he de plantear, si seré capaz de aguantar tantos kilómetros sin apenas haber corrido este año, pero la verdad es que esta vez todos mis pensamientos son positivos y creo que el ritmo de ultra trail es muy adecuado a mi entreno sobre dos ruedas, y que no tendré muchos problemas en realizar una buena carrera... En la que mi único objetivo es acabar y disfrutar de los muchos momentos buenos que te deja una prueba de esta características.
Nos vemos en Rialp.
martes, 28 de agosto de 2012
Vacaciones sobre dos ruedas
Como es normal todo lo que empieza suele acabar, y eso es lo que pasa cada año con las vacaciones... Da igual lo largas o cortas que estas sean, siempre se acaban rápido y casi siempre te dejan esa sensación de que podrías haber hecho mas cosas de las que has hecho o de las que no has hecho, y ahora solo falta esperar otro largo año hasta volver a tener tanto tiempo libre para poder disfrutar de tanto tiempo libre.
Estas vacaciones he dedicado mucho tiempo a hacer ciclismo de carretera, para ser mas exacto he dedicado mucho tiempo a escalar puertos de montaña, algunos de ellos con mucha historia y otros con no tanta historia pero con mucho encanto y gratas sorpresas.
Me acerqué unos días con Albert un gran amigo mío al Pirineo francés a recorrer algunos de los puertos que han hecho historia en el Tour de Francia, como Tourmalet, Aspín, Balés, Soulur, Aubisque, Portillón y Horquette Ancizan. Completé alguno de los puertos mas temibles de la comarca como Coll de Pal, Vallter, La Creueta, Barraques, Coll d'Ares y ComaOriola. Y me acerqué a la Garrotxa para completar alguna auténtica emboscada como Condreu, Bracons, Bellmunt o Collfred.
Vamos que he aprovechado estos días para hacer kilómetros sobre las dos ruedas de mi bicicleta, y ahora ya de vuelta al trabajo me queda el recuerdo de los momentos vividos y las ganas de que empiecen las vacaciones del año que viene para disponer del tiempo suficiente para volver a hacer lo que me apetezca durante todo el día.
Estas vacaciones he dedicado mucho tiempo a hacer ciclismo de carretera, para ser mas exacto he dedicado mucho tiempo a escalar puertos de montaña, algunos de ellos con mucha historia y otros con no tanta historia pero con mucho encanto y gratas sorpresas.
Me acerqué unos días con Albert un gran amigo mío al Pirineo francés a recorrer algunos de los puertos que han hecho historia en el Tour de Francia, como Tourmalet, Aspín, Balés, Soulur, Aubisque, Portillón y Horquette Ancizan. Completé alguno de los puertos mas temibles de la comarca como Coll de Pal, Vallter, La Creueta, Barraques, Coll d'Ares y ComaOriola. Y me acerqué a la Garrotxa para completar alguna auténtica emboscada como Condreu, Bracons, Bellmunt o Collfred.
Vamos que he aprovechado estos días para hacer kilómetros sobre las dos ruedas de mi bicicleta, y ahora ya de vuelta al trabajo me queda el recuerdo de los momentos vividos y las ganas de que empiecen las vacaciones del año que viene para disponer del tiempo suficiente para volver a hacer lo que me apetezca durante todo el día.
lunes, 23 de julio de 2012
Jugando a ser ciclistas
Estos últimos meses estoy centrando la mayoría de mi actividad deportiva en el cicloturismo, y la verdad es que cada día que pasa me divierto mas con este apasionante deporte, que práctico tantos días como puedo a lo largo de la semana.
Cada día descubro algún aliciente nuevo para el próximo día volver a subirme a mi bicicleta; desde un nuevo puerto por descubrir, a una variante nueva en los recorridos que mas conozco, el quedar con algún colega para salir a rodar ... que se yo cualquier excusa es buena para vestirme de ciclista y salir a "jugar" por cualquiera de las carreteras de esta privilegiada zona en la que resido.
¿Por que lo llamo jugar a ser ciclistas? Pues yo lo tengo muy claro, ya que si salgo solo siempre encuentro con quien picarme en la carretera tanto lo adelante yo como si me adelanta él, y si salgo en grupo los pequeños ataques están asegurados todo el camino, ya sea en un duro puerto o sea en el llano después de llevar mas de 100 Km en las piernas... Pero siempre queda esa chispa para lanzar un ataque o para defenderte de un ataque lanzado por el que llevas al lado, pero siempre acaba en risa ... Siempre jugando a ver quien es el justo portador del maillot amarillo de cada jornada de pedaleo.... Siempre emulando las míticas etapas del Tour o de la Vuelta, siempre buscando nuestro Tourmalet particular, siempre recordando hazañas épicas de los Indurain y compañía, siempre preparando tu propia estrategia para llegar el primero a una meta imaginaria o a lo alto de un collado... En definitiva, jugando a ser ciclistas.
Cada día descubro algún aliciente nuevo para el próximo día volver a subirme a mi bicicleta; desde un nuevo puerto por descubrir, a una variante nueva en los recorridos que mas conozco, el quedar con algún colega para salir a rodar ... que se yo cualquier excusa es buena para vestirme de ciclista y salir a "jugar" por cualquiera de las carreteras de esta privilegiada zona en la que resido.
¿Por que lo llamo jugar a ser ciclistas? Pues yo lo tengo muy claro, ya que si salgo solo siempre encuentro con quien picarme en la carretera tanto lo adelante yo como si me adelanta él, y si salgo en grupo los pequeños ataques están asegurados todo el camino, ya sea en un duro puerto o sea en el llano después de llevar mas de 100 Km en las piernas... Pero siempre queda esa chispa para lanzar un ataque o para defenderte de un ataque lanzado por el que llevas al lado, pero siempre acaba en risa ... Siempre jugando a ver quien es el justo portador del maillot amarillo de cada jornada de pedaleo.... Siempre emulando las míticas etapas del Tour o de la Vuelta, siempre buscando nuestro Tourmalet particular, siempre recordando hazañas épicas de los Indurain y compañía, siempre preparando tu propia estrategia para llegar el primero a una meta imaginaria o a lo alto de un collado... En definitiva, jugando a ser ciclistas.
viernes, 29 de junio de 2012
Historia de un gran día
Hace un par de meses, me llamó un buen amigo para salir un rato a correr y ya de paso explicarme un proyecto que tenía en mente, se trataba de traer la "flama del Canigó" hasta Campdevánol y sin relevos, es decir hacer un grupo de colegas y realizar unos 80 Km de alta montaña cargados con el tradicional fuego desde la cima del Canigó a 2784 metros de altitud en el Rosellón francés, en aquel momento y sin pensarlo mas de 1 o quizás 2 segundos respondí que ¡si!, y no le dí la mayor importancia.
La tradición catalana dice que el fuego del Canigó es el que ha de encender las hogueras de San Juan, y todos los pueblos buscan la manera de conseguir su llama para dicho fin, este año Campdevánol contaba con nosotros, y así empezó todo:
Salimos de aquí en coche el viernes 22 hasta el refugio de Cortalets, unos 800 metros por debajo del majestuoso Canigó, tras cenar y ver la puesta de Sol, nos fuimos a "dormir". A las 2:15h abandonamos nuestras "cómodas" camas y preparamos nuestras cosas y desayunamos para comenzar nuestra aventura a las 3 de la madrugada. Comenzamos a subir y a cruzarnos con gente que bajaban de encender el fuego de la cima a las 0:00h (toda una tradición), algunos de ellos nos decían que subíamos muy tarde... y nosotros contestábamos que era temprano que dependía de como se viese o si hablábamos del día 22 o del 23... En fin en menos de una hora y a buen ritmo coronamos la cima y encendimos nuestra llama en una pequeña lampara de aceite. Comenzamos el descenso destrepando la temible chimenea del Canigó en plena noche y cargados de la llama que tendríamos que proteger todo el día, tras varias risas pusimos pie en el camino y comenzamos a trotar, con dirección al refugio Aragón y de aquí al de Merialles. Tras guardar los frontales afrontamos el ascenso hacia Pla Guillem, desde donde seguimos la carena por la frontera hasta Mentet donde bajamos, ya en tierras catalanas a la estación de esquí de Vallter.
Aquí nos esperó un gran avituallamiento, sobre las 10 de la mañana, que nos sirvió para afrontar la dura subida al Coll de la Marrana y de aquí al Coll dels tres pics, la llama nos la íbamos repartiendo cada 15 minutos y la protegíamos del fuerte viento de las cumbres Gironinas. Comenzamos el descenso a Pardines, donde sobre las 15h nos esperaba Yolanda con bebida fresca y fruta, ya que el calor era sofocante en esos momentos.
Tras la parada afrontamos el duro ascenso de unos 900 metros de desnivel hasta la cima del Taga, una vez allí descendimos a Coll de Jou, donde encendimos la llama a los compañeros de Vallfogona, y continuamos nuestro camino hacia el Sant Amand para desde allí ya visualizar Campdevánol al final del valle unos 1000 metros mas abajo, la bajada con calma y sobre las 18:30h llegamos al pabellón donde nos esperaban los familiares. Una media hora después, recibíamos el aviso de ir a la plaza del pueblo, escoltados por la policía local y unos 50 motoristas, al entrar en la plaza fue espectacular, estaba llena a reventar y nos recibían con fuertes aplausos, fotos, televisión y mucha gente.... Nosotros con la emoción y convertidos en héroes locales nos fundimos en un abrazo que nos unió mas si cabe.
Los siguientes días, lo disfrutamos como niños, explicando nuestras batallitas y viéndonos en las televisiones y periódicos comarcales, como si hubiésemos realizado una gran gesta... Si supiesen que es lo que hacemos cada fin de semana.
La tradición catalana dice que el fuego del Canigó es el que ha de encender las hogueras de San Juan, y todos los pueblos buscan la manera de conseguir su llama para dicho fin, este año Campdevánol contaba con nosotros, y así empezó todo:
Salimos de aquí en coche el viernes 22 hasta el refugio de Cortalets, unos 800 metros por debajo del majestuoso Canigó, tras cenar y ver la puesta de Sol, nos fuimos a "dormir". A las 2:15h abandonamos nuestras "cómodas" camas y preparamos nuestras cosas y desayunamos para comenzar nuestra aventura a las 3 de la madrugada. Comenzamos a subir y a cruzarnos con gente que bajaban de encender el fuego de la cima a las 0:00h (toda una tradición), algunos de ellos nos decían que subíamos muy tarde... y nosotros contestábamos que era temprano que dependía de como se viese o si hablábamos del día 22 o del 23... En fin en menos de una hora y a buen ritmo coronamos la cima y encendimos nuestra llama en una pequeña lampara de aceite. Comenzamos el descenso destrepando la temible chimenea del Canigó en plena noche y cargados de la llama que tendríamos que proteger todo el día, tras varias risas pusimos pie en el camino y comenzamos a trotar, con dirección al refugio Aragón y de aquí al de Merialles. Tras guardar los frontales afrontamos el ascenso hacia Pla Guillem, desde donde seguimos la carena por la frontera hasta Mentet donde bajamos, ya en tierras catalanas a la estación de esquí de Vallter.
Aquí nos esperó un gran avituallamiento, sobre las 10 de la mañana, que nos sirvió para afrontar la dura subida al Coll de la Marrana y de aquí al Coll dels tres pics, la llama nos la íbamos repartiendo cada 15 minutos y la protegíamos del fuerte viento de las cumbres Gironinas. Comenzamos el descenso a Pardines, donde sobre las 15h nos esperaba Yolanda con bebida fresca y fruta, ya que el calor era sofocante en esos momentos.
Tras la parada afrontamos el duro ascenso de unos 900 metros de desnivel hasta la cima del Taga, una vez allí descendimos a Coll de Jou, donde encendimos la llama a los compañeros de Vallfogona, y continuamos nuestro camino hacia el Sant Amand para desde allí ya visualizar Campdevánol al final del valle unos 1000 metros mas abajo, la bajada con calma y sobre las 18:30h llegamos al pabellón donde nos esperaban los familiares. Una media hora después, recibíamos el aviso de ir a la plaza del pueblo, escoltados por la policía local y unos 50 motoristas, al entrar en la plaza fue espectacular, estaba llena a reventar y nos recibían con fuertes aplausos, fotos, televisión y mucha gente.... Nosotros con la emoción y convertidos en héroes locales nos fundimos en un abrazo que nos unió mas si cabe.
Los siguientes días, lo disfrutamos como niños, explicando nuestras batallitas y viéndonos en las televisiones y periódicos comarcales, como si hubiésemos realizado una gran gesta... Si supiesen que es lo que hacemos cada fin de semana.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)